martes, 28 de agosto de 2012

Casi un milagro



Ayer funcionaban las dos boleterías automáticas en la estación. Parecía, casi milagrosamente, un día normal en un tren normal en un país normal. Enfocando más la mirada, sin embargo, me encontré con un comunicado de la Unión Ferroviaria advirtiendo que de registrarse nuevos insultos y agresiones hacia los trabajadores por culpa del mal servicio interrumpirá el servicio. Dice el comunicado:
“La reacción de los pasajeros hacia los trabajadores, intentando responsabilizarnos del pésimo servicio que presta la empresa, reacción que se concreta con insultos y agresiones, nos pone en la obligación de informar a los señores pasajeros que de registrarse nuevamente hechos violentos contra los trabajadores ferroviarios nos veremos en la obligación de suspender totalmente el servicio”.
Esto no es normal, muchachos. Esto no camina, no funciona. Y no hablo del tren. Hablo de estar al borde de la discusión violenta por cualquier cosa en cualquier lado. Hablo de la falta de leyes previas que normen las conductas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario